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| El Cachón de la Rubia. Foto: José Manuel Castillo. |
Los residentes del municipio de Santo Domingo Este tienen un buen lugar donde pueden ir a darse un buen chapuzón sin tener que pagar un peaje ni cruzar un puente durante los días libres por el asueto de Semana Santa.
El Parque Mirador Cachón de la Rubia, ubicado en el sector Lucerna, zona nordeste de la ciudad de Santo Domingo, es la escapada ideal para ir a pasar un rato agradable con la familia. Sirva este articulo de invitación si no eres de la zona.
Uno de los principales atractivos del parque es el balneario de aguas cristalinas. Con poca profundidad está habilitado para el disfrute de todo el público, la corriente de aguas subterráneas alimentan el rio, que desemboca en la Isabela.
Varios lugareños afirman que la reserva natural es la mejor opción para Semana Santa, ya que no se enfrentan a los largos tapones que hay en las carreteras para salir de la ciudad. Esta reserva es un lugar tranquilo y vigilado por oficiales de Medio Ambiente y la Defensa Civil.
Adultos, niños, jóvenes e incluso mascotas llegan a disfrutar de los atractivos del lugar, se posicionan bajo la sombra de los arboles con largas mantas extendidas en el suelo y un par de bocinas con música para ambientar.
El lugar es perfecto para pasar una tarde en familia, irse de picnic, armar casa de campaña o montar bicicleta, entre otras actividades al aire libre.
Como reserva natural, el Cachón de la Rubia tiene como finalidad proteger y garantizar la conservación de los múltiples manantiales que se originan en la zona, afluentes del río Ozama, y muy especialmente el acuífero que aflora en el sitio.
El lugar posee una exuberante y variada flora nativa: caoba, javilla, campeche, ceiba, grallumo, guama, palma real, entre otras variedades. Dentro de su fauna se puede mencionar el Pato de Agua, La Gallareta, El Martín Pescador, El Hurón, La Cigua Palmera, La Rolita y el Pájaro Carpintero. También en los manantiales podemos encontrar la tilapia, guabina, truchas, camarones, cangrejos y jaibas.
La entrada es gratuita, no se permiten las bebidas alcohólicas ni los envases de vidrio. Se pide a los visitantes a cooperar con la limpieza y supervisar los niños entre las edades de dos a cinco años. Se puede llegar en vehículo hasta la orilla del rio.
Los visitantes pueden llegar a partir de la 8 de la mañana al lugar con sus trajes de baño y bultos de playa a pasar un momento agradable y desprenderse del clima caluroso que azota al Gran Santo Domingo en los días entre abril y agosto.
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